Después de rogarle que se fuera de la casa tras la comprobación de ambos de su torturada convivencia, ella acabó por acompañarlo eternamente en su dolida e infausta soledad masculina.

Después de rogarle que se fuera de la casa tras la comprobación de ambos de su torturada convivencia, ella acabó por acompañarlo eternamente en su dolida e infausta soledad masculina.