Olímpicas
Lanzamiento del serrucho
Al principio se maravilló de su carpintero al enterarse, por la propia voz del trabajador de las maderas, de que competiría en la próxima Olimpiada, pero se desengañó cuando el supuesto atleta, en un breve gazapo de su historia, dijo que competiría en el lanzamiento del serrucho en vez de haber pronunciado martillo, hablador insuperable el carpintero con más de cien kilos de peso.
